Organízate, soluciona los detalles pronto y estarás más relajado cuando llegues. Si te mudas al extranjero por un nuevo trabajo, ya tienes mucho ganado. Tendrás ingresos desde el principio y tus compañeros de trabajo te podrán ayudar a instalarte. Para garantizar una transición fluida, asegúrate de que has resuelto todos los temas legales que puedan afectar tu empleo, visas de trabajo, contratos de trabajo y requisitos impositivos. Los días festivos, las vacaciones y los servicios legales varían de país a país, así que infórmate antes de ir. Si te trasladas con tu actual empresa, el departamento de recursos humanos debería poder ocuparse de casi todo por ti. ¿Trabajas para una nueva empresa? Ponte en contacto con tu departamento de recursos humanos y ten preparada una lista de preguntas. También podrán ofrecerte asistencia para el traslado y consejos sobre vivienda, transporte y demás. Tu nuevo empleador podría ayudarte con los gastos de instalación. Haz un estudio. ¿Cómo es el costo de la vida comparado con el que está acostumbrado? ¿Podrás mantener o mejorar tu nivel de vida con tu nuevo salario? También debes pensar un poco en el futuro. ¿Cuánto tiempo tienes pensado quedarte en tu nuevo trabajo? ¿Un año? ¿Cinco años? Si el trabajo no saliera bien. ¿Podrás trabajar en otro lugar o regresarías a casa? ¿Te cubre tu nuevo empleador los costos de instalación o tienes pensado organizar la mudanza tu mismo? Ponte en contacto con Crown y te ayudaremos a organizarlo todo.